Etica


La selección y la valoración de los Recursos Humanos se basan generalmente en el plano físico y en el intelectual. Cualquiera que viva en un contexto social, sin embargo, se da cuenta inmediatamente de que otros elementos marcan la diferencia, elementos que casi nunca se tienen en consideración y que pueden representar el éxito o el fracaso de una empresa: emociones, voluntad y calidad interiores, como fiabilidad, capacidad de amar y ser amados, justicia, paciencia, alegría, generosidad, lealtad, sinceridad, abnegación.
En el futuro, las organizaciones que consigan alcanzar la excelencia serán aquellas que hayan descubierto cómo utilizar el compromiso de los individuos y la capacidad de aprender a todos los niveles: la centralidad del ser humano, por tanto, podrá determinar el éxito de las empresas solo si se considera como primer elemento de satisfacción.
Hay – en síntesis – un cambio en curso referente a la gestión de la organización: las empresas activas en responsabilidad social ya no serán consideradas solo éticas, sino también sobre todo más capaces de crear valor.
MA-FRA mantiene un fuerte compromiso desde hace tiempo con la ejecución de políticas de responsabilidad empresarial. Ente las iniciativas emprendidas se encuentra la adhesión, formalizada en agosto de 2005, al Global Compact, un programa de acción promovido por Naciones Unidas – a iniciativa directa del Secretario General – con el propósito de implicar al mundo empresarial en una nueva forma de colaboración (con las mismas Naciones Unidas), a través de la adhesión a diez principios universales en las áreas de los derechos humanos, de la protección del trabajo y de la preservación del medio ambiente.
En el campo de los derechos humanos: apoyar y respetar tales derechos en el ámbito de las correspondientes esferas de influencia; asegurarse de no ser, tampoco indirectamente, cómplice de abusos de los derechos humanos.
En la protección del trabajo: garantizar la libertad de asociación de los trabajadores y reconocer el derecho a la negociación colectiva; asegurarse de no emplear trabajo forzado y obligatorio; abstenerse de emplear a trabajadores menores; eliminar cualquier forma de discriminación en las políticas de contratación y despido.
En el ámbito medioambiental: tener un enfoque preventivo respecto a los desafíos medioambientales; promover iniciativas para una mayor responsabilidad medioambiental; estimular el desarrollo y la difusión de tecnologías que no dañen el medio ambiente.
El enfoque ético de MA-FRA en el mundo del trabajo se halla también en las relaciones construidas a lo largo de los años con sus concesionarios, vínculos de muchos años en numerosos casos y de absoluta fidelidad, que en muchas ocasiones han alcanzado ya la “segunda generación”. Para obtener todo esto, MA-FRA cuenta siempre con el respeto y con el intercambio de ideas, la máxima fidelidad, la formación y la actualización de sus socios, la atención y el mantenimiento de las zonas asignadas, así como la transparencia y la voluntad de compartir junto a todos ellos un gran proyecto.
Formación y actualización, respeto a la zona

Para visitar el sitio web del Global Compact:

www.unglobalcompact.org

MA-FRA sostiene AMREF